Descend to advance

The image presents us with a stone staircase, worn by time and the steps of many people. Seeing this image, many imagine climbing to the top; but what happens when the perspective is not of ascent but of descent. The stairs is also an image that invites us to descend, to enter a space that seems ancient and deep.

The image evokes in me the idea of a memory, of an old leader I knew in my youth who used the phrase: “That in order to advance sometimes it is necessary to descend” - he said that in our desire for progress we always want to climb, to climb, to advance; however, sometimes it is necessary to get down from the cloud, to put our feet on the ground. With the passing of time I adapted and modernized it using: - “That sometimes in life you have to do like the helicopter, which needs to lower the tip before taking off.”

Contrary to what everyone thinks, we always associate the ladder with going up but it is necessary to understand that the descent is not a defeat, but a journey to introspection, to humility. Changing the perspective of the ladder is a recognition that to build a solid building we must first dig deep foundations.

We can also see that each step down this worn stone staircase represents a layer of our being that we explore, a truth that we confront or a burden that we choose to let go of. The noticeable wear in the center of each stone speaks to us of dignity, of the constancy of descending on that journey within.

The person who has the higher level of consciousness understands that to descend voluntarily is an act of wisdom, it is to pause, reevaluate the path and strengthen the spirit before undertaking the true ascent. This conscious descent allows us to accumulate the strength and perspective that is lost in a hasty race to the top.

So when looking at these steps from the perspective of the descent, we should not judge it as a setback but as an opportunity, the opportunity to move inward, to find the firm ground on which we can once again find our essence. Because in the great staircase of life, sometimes it happens that it is more important to descend in order to advance.

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En Español

Descender para avanzar

La imagen nos presenta una escalera de piedra, gastada por el tiempo y de los pasos de muchísimas personas. Al ver esta imagen muchos se imaginan escalando hasta llegar a la cima; pero qué pasa cuando la perspectiva no es de ascenso sino de descenso. Las escaleras también es una imagen que nos invita a bajar, adentrarnos a un espacio que se intuye antiguo y profundo.

La imagen me evoca la idea de un recuerdo, de un antiguo líder que conocí en mi juventud que usaba la frase: - “De que para avanzar a veces es necesario descender”- él decía que en nuestro afán de progreso siempre queremos subir, escalar, avanzar; sin embargo a veces hay que bajarse de la nube, poner los pies en la tierra. Con el transcurrir del tiempo yo la adapté y la modernice usando: -“Que a veces en la vida hay que hacer como el helicóptero, que necesita bajar la punta antes de despegar”.

Contrariamente a lo que todo el mundo piensa, siempre que asocia la escalera con el subir pero es necesario entender que el descenso no es una derrota, sino un viaje a la introspección, a la humildad. Cambiar la perspectiva de la escalera es un reconocimiento que para construir un edificio sólido primero hay que cavar cimientos profundos.

Podemos también ver que cada escalón hacia abajo en esta escalera de piedra degastada, representa una capa de nuestro ser que exploramos, una verdad que confrontamos o una carga que decidimos soltar. El notable desgaste en el centro de cada piedra nos habla de dignidad, de la constancia de bajar en ese viaje al interior.

Aquella persona, que tiene el nivel de conciencia superior comprende que descender voluntariamente es un acto de sabiduría, es hacer una pausa, reevaluar el camino y fortalecer el espíritu antes de emprender el verdadero ascenso. Este descenso consciente, nos permite acumular la fuerza y la perspectiva que se pierde en una carrera precipitada hacia la cima.

Así al observar estos escalones desde la perspectiva del descenso, no lo debemos juzgar como un retroceso sino como una oportunidad, la oportunidad de avanzar hacia dentro, de encontrar el terreno firme sobre el cual podemos nuevamente encontrar nuestra esencia. Porque en la gran escalera de la vida, a veces pasa que es más importante descender para poder avanzar.

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